Born to explore
Entonces decidí arrancar por lo primordial. Averiguar qué hacer, dónde y cuándo.
Se lo comenté a una amiga que sabía que había hecho una experiencia similar, así que no perdía nada preguntándole. Ella había realizado el viaje con una amiga y se fueron a Estados Unidos. Se anotó en un Work and Travel y se fue a una ciudad en donde se practicaban deportes en la montaña, ya que en época invernal hay mucha MUCHA nieve y mucha demanda laboral también. La verdad que no recuerdo el nombre del lugar ni de la empresa, pero no viene al caso.
Ella se fue por dos temporadas de invierno, trabajó y vivió en ese complejo por varios meses.
La idea me cerraba, me gustaba, el único inconveniente era que no quería irme a vivir a EEUU, sino a Europa. Más precisamente a Inglaterra. Sentía que si no lo hacía en este momento, no lo iba a poder hacer nunca más – qué dramática ¿no?-