Una experiencia muy positiva

Era un Domingo por la mañana, la señora dueña del Airbnb me llamó y me dijo que su hijo - por cierto, yo estaba durmiendo en su habitación- , iba a llegar al otro día. El chico se había ido con su novia a Tailandia y se iban a quedar por 3, o 4 meses, resulta que la novia extrañaba mucho a su familia así que al mes se volvieron.

Born to explore

Rápidamente la dueña de casa me dijo, -“Vos no te preocupes, yo te metí en este brete, yo lo voy a solucionar”. La amamos.⁣
Me consiguió un lugar disponible en la casa de la hermana. Afortunadamente era un lugar bastante grande y contaba con varias habitaciones. En una de ellas dormía la hija, en otra el marido, en otra ella, la dueña, en otra una chica japonesa profesora de inglés que estaba allí para seguir aprendiendo, y en la última habitación, estaba yo.

Esa casa tenía una historia muy interesante y particular. Hacía muchos años atrás había estado viviendo uno de los capitanes del TITANIC podías encontrar en los pasillos, fotos, láminas de la época, carteles que hacían alusión a este acontecimiento; otro dato curioso que me llamó poderosamente la atención, era que, en el medio de la sala de estar había un piano de cola, que una vez en un bar de Liverpool, tocó John Lennon en sus comienzos … en ese instante mi mundo se paralizó.

Y ahí estaba yo, sacando fotos, haciendo videos, intentando tocar el piano, porque de música no entiendo nada, pero sumando más y más recuerdos a mi bitácora de viajes.

Cada tanto me quedaba hablando con la hija de la señora y su inquilina, la chica que venía de Japón.⁣

Me asombraba muchísimo que en una misma habitación eramos 3 chicas de culturas totalmente distintas, del otro lado del mundo, con vidas muy diferentes, pero que esos ratos que compartíamos éramos muy parecidas, inquietas, interesadas en saber cómo vivíamos, cómo nos relacionábamos, qué comíamos, y eso lo tomo como una experiencia muy positiva.

Can´t wait

5/5

Llegó el momento de irme, la casa había cumplido un ciclo, y quería recorrer un poco más del país que me dio la bienvenida al viejo continente.

Ya había conocido Chester, Manchester, Leeds cuando tenía libre en el trabajo, y durante mi estadía en Liverpool, había podido recorrer estas ciudades ya que no estaban lejos de donde me quedaba y podía ir y volver en el día. Eso es lo bueno de Europa y las distancias cortas. La posibilidad de recorrer un montón de lugarcitos nuevos en poco tiempo.

Se acercaba mi cumpleaños, el 16 de Diciembre y quería pasarlo en un lugar mágico para mí: Nottingham.
¿Quién no conoce la historia de Robin Hood? Quería pasar las vísperas de mi cumpleaños allá, así que me subí al colectivo y en pocas horas allí me encontraba.

Después me fui a Birmingham, Volví a Leeds, y por último, me fui a York.

Allí pasé la Navidad, sola y triste. Esperé hasta las 4 de la mañana -por la diferencia horaria- para saludar a mi familia, y después me fui a dormir. Ya quería que llegara mi hermana.

Finalmente llegó el día. El 26 de Diciembre partí de York hacia Londres. Me hospedé en un hostel muy malo que no tenía ni Wifi, ni contaba con baño en la habitación. Había que compartirlo con todo el piso, sumado a que hacía muchísimo frío. Esa noche no me bañé.

No estaba cómoda, y después de las 6/7 PM no salí más del hostel. Era pleno invierno, y estaba helando. Me salvó “La la land” la película, que tenía descargada en la computadora así que esa noche me acosté y la vi entera.⁣

A las 8 am sonó el despertador, preparé mis cosas, hice el check out, y salí con el colectivo a las 12 del mediodía para el aeropuerto para reencontrarme con mi hermana! CAN´T WAIT!!

Allí comienza nuestra travesía, recorrimos 12 ciudades oficiales – pasamos por varias más en el medio -en tan sólo un mes.
LONDRES, PARIS, AMSTERDAM, BERLIN, PRAGA, VERONA, VENECIA, FLORENCIA, MUNICH, BARCELONA, ROMA, MADRID.
Cada lugarcito con su mística …